El Polaris Chronograph es un reloj versátil, que sirve como complemento informal y elegante para el día a día y reloj deportivo de alto rendimiento, está diseñado para ofrecer una comodidad óptima al llevarlo en la muñeca.
Su caja de acero de 42 mm, presenta los códigos claves del diseño de la colección Polaris: líneas firmes, asas curvas marcadas, un bisel fino, una caja de cristal y una llamativa combinación de superficies cepilladas y pulidas.
La esfera está elaborada en gris océano y posee una estructura compleja. Se compone de un disco central, un anillo intermedio al que se aplican los índices y un anillo exterior con escala taquimétrica.
Su disposición es atemporal y de una lectura intuitiva, con un segundero central de cronógrafo que permite una lectura más precisa de esta medición fundamental. Equilibrada por el contador de 30 minutos a las 3, la subesfera a las 9 anima la esfera con la indicación del segundero.
En consonancia con los códigos de diseño contemporáneo de Polaris, las agujas esqueletadas garantizan una mayor visibilidad de las indicaciones y los audaces índices trapezoidales equilibran la minuciosidad de las indicaciones del cronógrafo.
El revestimiento luminiscente de los índices, los números y las puntas de las agujas mejora la legibilidad en cualquier condición lumínica, un atributo esencial para un reloj de aventura.
Polaris Chronograph: un movimiento con elegancia mecánica
El Polaris Chronograph tiene un fondo de caja de cristal de záfiro revela el movimiento automático Calibre 761, ejemplo por excelencia del enfoque relojero de Jaeger-LeCoultre, que combina alto rendimiento y elegancia mecánica.
Impulsado por dos barriletes, el movimiento de cronógrafo totalmente integrado cuenta con un mecanismo de cronógrafo conrueda de pilares y embrague vertical, y ofrece una reserva de marcha de 65 horas.
El delicado acabado incluye tornillos azulados y decoración Côtes de Genève en la placa base y el emblemático rotor de cuerda calado con el motivo “JL”.
El movimiento ha sido diseñado, producido y ensamblado por Jaeger-LeCoultre en su Manufactura, en el Vallée de Joux, en Suiza.
